Lesiones más comunes al jugar al fútbol
Dentro de las lesiones comunes más leves y que requerirán un poco de reposo, frío o calor y masajes, encontramos las lesiones en los gemelos e isquios, las tendinitis aquilea y de aductor.
El fútbol es uno de los deportes más populares, pero también uno de los más exigentes. No podemos pasar por alto que en el fútbol se realiza una carrera continua, saltos, sprints, choques, cambios de dirección, etcétera. A esto se añade que el terreno de juego es bastante irregular. Las lesiones de los músculos de las piernas son bastante frecuentes entre los jugadores.
¿Cuáles son los riesgos de jugar al fútbol?
Todos los jugadores de fútbol, sean profesionales o simples aficionados, tienen riesgo de sufrir alguna de las lesiones más comunes ocasionadas por este deporte. El fútbol requiere gran condición física y, además de todos los movimientos que se tienen que realizar en él, la irregularidad del terreno de juego también es un factor determinante para lesionarse.
Debido a su alta exigencia, las lesiones en el fútbol son altamente frecuentes. Los riesgos de sufrir una lesión aumentan si la persona no está lo suficientemente preparada, no se recupera como es debido y si no tiene la técnica necesaria para jugar. Estas lesiones, sin embargo, pueden prevenirse. Para prevenirlas, lo primero que tienes que hacer es conocerlas y seguir un entrenamiento constante y que permita que los músculos se recuperen; también es indispensable hacer estiramientos de los músculos y calentamiento previo.
La intensidad y gravedad de las lesiones por el fútbol puede variar. Hay algunas que son más fáciles de tratar que otras y con las que solo se requieren unos días de descanso. Las lesiones más graves son las roturas de menisco y esguinces en tobillo y rodilla, que te dejarán en el banquillo durante algunas semanas e incluso meses.
Dentro de las lesiones comunes más leves y que requerirán un poco de reposo, frío o calor y masajes, encontramos las lesiones en los gemelos e isquios, las tendinitis aquilea y de aductor.
Rotura del músculo
Una de las lesiones más frecuentes entre los deportistas de élite y aficionados es la rotura muscular. Esta se ocasiona por una sobrecarga, es decir, cuando el músculo se somete a trabajo excesivo hasta romperse. La lesión tiene un tiempo de recuperación de entre tres y seis semanas, pues varía en función del músculo, la zona y el tamaño de la lesión.
Este tipo de lesiones requieren de terapia de recuperación, así como relajación del músculo. Es importante ejercitar el músculo de nuevo con estiramientos.
Esguinces
El esguince en los futbolistas se ocasiona por una entorsis o torcedura del pie. En general, muchas personas han sufrido esguinces a lo largo de su vida, pero es difícil librarse de esta lesión si practicas fútbol. El esguince de tobillo viene acompañado, en ocasiones, de una rotura del ligamento lateral o del medio.
La recuperación de esta lesión también varía entre tres y seis semanas.
Rotura del ligamento cruzado anterior
Esta lesión se presenta cuando los ligamentos que previenen una descomposición de la rodilla y le dan estabilidad se rompen por estirarla de golpe. Se trata de una de las lesiones más serias y que requiere de fisioterapia para recuperar la movilidad poco a poco.
Tendinitis
Las tendinitis son muy frecuentes, no solo entre los futbolistas, sino entre cualquier persona. Como su nombre indica, la tendinitis es la inflamación de los tendones encargados de dar movimiento a los músculos y huesos del cuerpo. Cuando uno de estos tendones se inflaman, entonces se producen molestias agudas y focalizadas en la zona.
La tendinitis (puede ser en la zona del gemelo o en el área del pie) se produce por una repetición constante de una serie de movimientos y ejercicios pesados durante un largo período de tiempo. Cuando el tendón comienza a desgastarse, se inflama y aparecen las molestias.
Esta lesión de futbolista no suele desaparecer del todo, pero con los cuidados adecuados (que incluyen masajes, estiramientos y calentamientos específicos), se pueden aliviar y prevenir su aparición tan continuada.
Las tendinopatías, como también se las conoce, pueden afectar a dos zonas distintas del tendón. Así, estas lesiones aparecen en la unión del tendón con el hueso del calcáneo (lesiones insercionales) o sobre el cuerpo del tendón (no insercionales). Es importante cuidar y tratar las tendinitis a tiempo, pues si se sigue haciendo un esfuerzo sobre la zona afectada, se puede producir una rotura.
Pubalgia
Una lesión bastante común entre los futbolistas profesionales es la pubalgia. Se trata de una lesión con síntomas que se manifiestan en la zona del pubis y presentan irradiaciones de molestias que se extienden por distintas zonas del cuerpo: aductores, abdominales, arcos crurales, etcétera.
La pubalgia ocurre cuando se presenta un desequilibrio de fuerzas entre los músculos antagonistas y agonistas. Para aliviar esta lesión es importante un reequilibrio de la musculatura que se extiende alrededor de la pelvis.
¿Prevenir y aliviar las lesiones más comunes en el fútbol?
Siempre es posible prevenir y aliviar las lesiones. Para ello es necesario seguir un entrenamiento adecuado, es decir, no excederse y dejar al músculo descansar y recuperarse todo lo necesario antes de retomar la actividad física intensa. También es indispensable llevar una alimentación equilibrada y tomar mucha agua; la hidratación muscular, que previene lesiones, se consigue con la suficiente cantidad de líquido en el cuerpo.
Por otra parte, el futbolista debe realizar los estiramientos y el calentamiento necesario antes y después de la actividad física. Para contribuir a la relajación del músculo y con ello, prevenir las lesiones, es aconsejable aplicar un contraste de frío y calor sobre la zona trabajada, así como dar masajes.
Los masajes y la aplicación de frío o calor también sirven a manera de tratamiento para aliviar las molestias ocasionadas por la lesión. ¿Cómo realizar estos masajes? Puedes ayudarte de productos como Fisiocrem Gel Active, que ayuda a la preparación muscular. Gracias a su fórmula, este producto ayuda a la preparación muscular antes del ejercicio y ,tras realizarlo, a relajar la zona para su recuperación.
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